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Destinos / Hungría - La perla del Danubio
Para los románticos “La Perla del Danubio”, para los historiadores el “Paris del Este” y para los curtidos aventureros “La Capital Mundial de las Aguas Medicinales”, Budapest tiene tantos nombres como encantos y atractivos.
Hay muchas buenas razones para ir a Hungría: es un país con un fuerte patrimonio histórico y hay mucho que hacer. Ya sea verano o invierno, Hungría es un país acogedor e ideal para probar cosas nuevas.
Para entender mejor las maravillas de este país de ensueño, pincha aquí para ver el video.Viajar a Hungría en avión
Por su ubicación, tan solo se necesitan 2–3 horas para llegar en avión a Budapest desde las principales ciudades europeas, 5–6 horas desde Oriente Medio y alrededor de 9 horas desde la Costa Este del continente americano. El destino más habitual es Budapest, pero existen numerosos vuelos internacionales a Debrecen; o al aeropuerto de Sármellék, junto al lago Balatón, destinado principalmente para vuelos chárter.
Aeropuerto internacional de Liszt Ferenc, Budapest
El aeropuerto más transitado de Hungría es el aeropuerto internacional de Ferenc Liszt (antes conocido como aeropuerto Ferihegy), situado a unos 20 kilómetros al sureste de Budapest. El aeropuerto cuenta con dos terminales: 2A y 2B. La página web oficial del aeropuerto (bud.hu) ofrece información actualizada de vuelos, mapas e información acerca de los servicios que se ofrecen, entre ellos el aparcamiento. Los viajeros que aterrizan en el aeropuerto de Ferenc Liszt pueden desplazarse al centro de la ciudad en transporte público, en coche o en taxi.
Clima:
Hungría tiene un clima continental templado con cuatro estaciones bien diferenciadas. Los veranos son calurosos, con bajos porcentajes de humedad en general aunque con lluvias frecuentes, mientras que los inviernos son fríos y nevados. La temperatura máxima promedio en verano es de 23 a 28°C y la temperatura mínima promedio en invierno es de -3 a -7 °C.
Zona horaria:
Hungría se encuentra en el huso horario de Europa Central (GMT+1).
Horario de verano: va entre finales de marzo y finales de octubre (CET+1/GMT+2).
Moneda y dinero:
La moneda de Hungría es el forint (abreviado HUF o Ft). Si desea cambiar dinero a forines, hágalo en un lugar oficial de cambio de divisas. Nunca cambie dinero en la calle con extraños, ya que esto está prohibido por la ley.
Hay cajeros automáticos en casi cada esquina en la parte central de Budapest, y encontrará al menos un cajero automático en cada ciudad del interior. Puede sacar moneda local, o sea forines de los cajeros automáticos.
Es prácticamente imposible enumerar todo lo que merece la pena hacer, ver o degustar en Budapest, especialmente porque una jornada en la capital húngara y sus alrededores llevará, sin duda, a cada visitante a descubrir otras cosas por sí mismo. Sin embargo, hay algunos lugares que no se pueden perder.
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Otras ciudades importantes son Győr en la parte occidental, Pécs y Szeged al sur, Debrecen al este y Miskolc en el noreste. Hungría es un Estado unitario, dividido en 19 condados. También hay 23 ciudades con derechos de condado.
La geografía de Hungría está definida por sus dos ríos principales, el Danubio y el Tisza. Estos dos ríos dividen al país en tres secciones: Dunántúl (literalmente «más allá del Danubio» o Transdanubia), Tiszántúl («más allá del Tisza»), y Duna-Tisza köze («entre el Danubio y el Tisza»). Transdanubia es básicamente una región montañosa que incluye el tramo más oriental de los Alpes (llamado Alpokalja), las montañas de Transdanubia en la región central, y las montañas Mecsek y Villány (ambas famosas por sus viñedos) en el sur. En la parte norte del país se encuentran las laderas de los Cárpatos. El pico más alto de Hungría es Kékes, con sus 1014 metros, que también se encuentra aquí. El país alberga una red de cuevas de aguas termales que es la más grande del mundo, y el segundo lago termal más grande del mundo (en húngaro Hévíz), así como el lago más grande de Europa Central —el Lago Balatón— y los pastizales naturales más grandes de Europa, la Gran Llanura Húngara o «Alföld» en húngaro.
Tratamientos de salud con el uso del agua, el lodo o el clima especial del lugar
Aproximadamente el 80% del territorio húngaro tiene alguna forma de agua termal subterránea —una condición que sólo superan Japón, Islandia, Italia y Francia. Gracias a su composición exclusiva y sus propiedades curativas excepcionales, este recurso natural especial hace de Hungría el destino perfecto para aquellos que buscan un lugar que les puede ofrecer salud, recreación o tratamientos de belleza.
Sin parangón en Europa, Hungría acoge a los huéspedes que buscan salud y relajación en 34 balnearios certificados. Los tratamientos en estas instalaciones suelen utilizar las propiedades curativas naturales de las aguas termales, del lodo mineral y de las condiciones del microclima local.